
En un mundo acelerado, hiperconectado y saturado de estímulos, Bruguer propone bajar el ritmo y reconectar con lo esencial. Bajo el concepto “crea tu propio ritmo”, la marca presenta su Color del Año 2026, una familia cromática que gira en torno al Ritmo de los Azules: tres tonalidades que invitan a crear
espacios donde el bienestar y la expresión personal fluyen a su propio compás.
Los tres colores protagonistas: Azul Slow™, un azul profundo y meditativo; Azul Flow™, un azul claro y aireado; y Azul Free™, un azul vibrante y lleno de energía, componen una paleta versátil y emocional. Cada uno refleja una forma distinta de vivir y habitar los espacios: más lenta, más conectada o libre.
El azul: el color más querido del mundo y el que mejor nos hace sentir.
Según el estudio anual de tendencias globales de AkzoNobel, el azul se ha convertido en el color que mejor responde a las necesidades emocionales del momento: calma, estabilidad y frescura. No es casualidad.
Desde hace siglos, el azul ha simbolizado el equilibrio entre cuerpo y mente. Y hoy, la ciencia lo confirma.
Diversos estudios en el campo de la neuroestética, una disciplina que explora cómo el arte y el entorno influyen en el cerebro, demuestran que el color azul puede tener un efecto directo en nuestro bienestar.
La doctora Nancy Etcoff, Assistant Clinical Professor en Psicología en la Harvard Medical School, descubrió que las personas se sienten “conmovidas” por la belleza porque activa simultáneamente dos áreas del cerebro relacionadas con la emoción y el placer.
Por su parte, Semir Zeki, Profesor de Neuroestética en University College London, demostró que los centros de placer del cerebro “se iluminan” cuando percibimos algo bello. Y ya a mediados del siglo XX, el colorista Faber Birren defendía que el azul tiene la capacidad de reducir la presión arterial, calmar la respiración y disminuir la actividad hormonal, contribuyendo a un estado de serenidad y concentración.
Estudios más recientes apuntan incluso a que pasar tiempo en espacios azules, ya sea en entornos naturales o interiores pintados en estas gamas, puede reducir el riesgo de estrés, ansiedad, obesidad y enfermedades cardiovasculares (BBC Future Planet, 2022).
En una época de sobreexposición digital y ritmo frenético, el azul actúa como un bálsamo visual. Su capacidad para aportar calma y orden convierte este color en una herramienta terapéutica para el hogar.
Tu espacio, tu ritmo: tres formas de vivir el color.
La investigación global de tendencias ColourFutures™ 2026, desarrollada por el equipo de diseño de AkzoNobel junto a expertos internacionales en arquitectura, comportamiento y estilo de vida, revela un deseo universal: volver a espacios que nos ayuden a desconectar, reconectar y disfrutar.
Bruguer traduce esa necesidad en una propuesta estética accesible y contemporánea, donde el color no se impone, sino que acompaña y refleja el ritmo personal de cada hogar.
El concepto “Crea tu propio ritmo” (Create your rhythm of blues) se materializa en tres historias cromáticas que reflejan los distintos compases de la vida cotidiana:
- Colores Slow: tonos naturales y serenos para quienes buscan descanso y concentración. Invitan a crear espacios contemplativos donde recargar energías.
- Colores Flow: una fusión de azules y tierras cálidas que evocan conexión, comunidad y armonía. Ideales para hogares acogedores donde compartir y sentirse en casa.
- Colores Free: una paleta vitalista y luminosa que despierta la creatividad y la diversión. Perfecta para quienes entienden el color como una forma de expresión libre.
Cada gama tiene como hilo conductor los tres azules protagonistas, que pueden combinarse entre sí o con el resto de la paleta 2026 para transformar la atmósfera de cualquier espacio.
Bruguer invita a descubrir en el color una nueva herramienta de bienestar cotidiano.
Más que una tendencia decorativa, el Ritmo de los Azules es una manera de entender cómo el entorno influye en nuestro ánimo y nuestra energía.
