Cómo pintar un círculo que sirva de marco

1. Comprueba y prepara las paredes

Un círculo que destaque pondrá de relieve cualquier imperfección, así que antes de empezar comprueba que las paredes no tengan ninguna grieta o irregularidades.

2. Prepara las herramientas

Para el siguiente paso, necesitarás una cuerda, una cinta métrica, cinta de enmascarar o una chincheta, un lápiz y unas tijeras.

3. Mide el círculo

Determina qué tamaño de círculo quieres. Una vez decidido, calcula el radio (la distancia desde el centro hasta el borde).

Corta un trozo de cuerda de la longitud del radio y haz un lazo en uno de los extremos; asegúrate de que dejas suficiente cuerda extra para el lazo o tu círculo quedará más pequeño de lo que habías calculado. A continuación, pega o clava el otro extremo de la cuerda al centro del círculo.

4. Traza el círculo

Mete el lápiz dentro del lazo, tensa la cuerda y con pulso firme dibuja un círculo alrededor del punto central. Si cometes un fallo, no te preocupes, puedes borrarlo y comenzar de nuevo.

5. Pinta el contorno

Aplica el color que hayas elegido para destacar con una brocha pequeña y pinta el borde dentro del círculo procurando que no sobrepase la línea de lápiz.

6. Rellénalo

Rellena el resto del círculo siguiendo su forma en pinceladas circulares. Si el círculo es grande, puedes usar un rodillo para esta parte.

7. Aplica una segunda capa

Cuando la primera capa esté seca, aplica la segunda con la misma técnica. Aplica una tercera capa en caso de que el color sea oscuro.

¡Ya puedes dar un paso atrás y contemplar tu obra de arte!