Los rodapiés, esos elementos a menudo subestimados en la decoración, están viviendo un auténtico renacimiento. Han dejado de ser simples protectores de las paredes para convertirse en piezas clave que pueden transformar por completo un espacio.
Desde Jesús del Ser nos aconsejan y nos cuentan cómo un elemento meramente funcional cada vez toma más protagonismo en los diseños de interior, complementando perfectamente los suelos de madera.
El rodapié, también conocido como zócalo, ha evolucionado mucho en los últimos años y ha pasado de ser un simple elemento funcional hasta convertirse en un elemento decorativo clave en el diseño de interiores. Los rodapiés ahora marcan la diferencia de un diseño interior bien rematado, ya que hace que los espacios se vean más elegantes y muy bien terminados.
Lo que hace que los rodapiés sean tan especiales y cobren tanta importancia en la actualidad estriba en su versatilidad y en que pueden ser totalmente personalizados. Se adaptan a cualquier estilo decorativo, desde el más clásico hasta el más moderno en una amplia gama de materiales, colores y diseños que permite crear rodapiés únicos y personalizados, aportando cáracter y distinción en las viviendas.
Seis tendencias en rodapiés
A continuación, desde Jesús del Ser nos comentan algunas de las tendencias en rodapiés más destacadas.
Rodapiés altos
Los rodapiés de gran altura, que van de 10 cm hasta 20 cm o más, son los que están arrasando. Este tipo de rodapié añade un toque de elegancia y sofisticación, especialmente en interiores de estilo clásico o neoclásico. Se usan mucho en colores neutros como blanco, gris o beige para crear un contraste con las paredes y dar un efecto visual de mayor altura a la estancia.
Colores en contraste
Los rodapiés en colores como negro, azul oscuro, o incluso tonos más atrevidos como verde oliva o terracota, están siendo muy utilizados. La idea es que el rodapié funcione como un elemento decorativo en sí mismo, destacándose del color de las paredes o el suelo. Este enfoque es perfecto para añadir personalidad a una habitación o para coordinar con otros detalles decorativos.
Rodapiés empotrados o enrasados
Los rodapiés empotrados o enrasados con la pared están ganando terreno en los diseños más contemporáneos y minimalistas. Estos rodapiés se colocan al mismo nivel que la pared, eliminando cualquier relieve. Este enfoque crea una transición más suave entre la pared y el suelo, proporcionando una apariencia limpia y moderna. Es ideal para quienes buscan un estilo más depurado.
Rodapiés con iluminación LED integrada
Para viviendas más modernas, los rodapiés con tiras de LED integradas son una tendencia innovadora y funcional. Estos no solo sirven como protección para la base de la pared, sino que también aportan una fuente de luz indirecta que puede mejorar la atmósfera de una habitación. Se utilizan mucho en pasillos, escaleras, baños, o incluso en cocinas, y son ideales para crear ambientes acogedores o para proporcionar iluminación indirecta.
Rodapiés decorativos o con molduras
Volviendo a estilos más tradicionales, los rodapiés con molduras decorativas están reapareciendo, especialmente en interiores con un estilo más clásico o victoriano. Se pueden encontrar rodapiés con diferentes molduras o detalles que añaden un toque ornamental y enriquecen visualmente el espacio. Este tipo de rodapiés se utiliza mucho en combinaciones con molduras de techo o marcos de puertas.
¿Cómo elegir el rodapié perfecto?
El rodapié debe estar en armonía con el diseño general del interior, siguiendo su estilo decorativo.
En cuanto al tamaño, la altura del techo es determinante. Los rodapiés más altos pueden hacer que los techos parezcan más altos, mientras que los más bajos son ideales para espacios pequeños, aunque en general, se lleven lo más altos posible. “Así, si una vivienda es estándar, con dos metros y medio de altura, debería colocarse de 10-15 cm, mientras que si los techos son altos queda muy vistosos a partir de 25 cm”, detalla Del Ser.
El material del rodapié debería combinar con el material del suelo para crear un aspecto cohesivo, sin embargo, el color del rodapié puede contrastar o complementar el color de las paredes, para darle un aspecto más llamativo a la par que elegante, concluye la gerente.