La primavera es el momento ideal para planificar cómo queremos tener el jardín en verano. Los bulbos de verano aportan unos colores incomparables y mucha vida al jardín, con una explosión de tonos intensos cuando llegan los meses cálidos. ¡Plántelos en primavera para sentar la base de un jardín estival lleno de vida y color!
Combinar colores.
Puede elegir un color protagonista o combinar varios colores vivos. Por ejemplo, el fucsia con el naranja causan un efecto llamativo y enérgico, mientras que el amarillo con el azul crean una atmósfera tranquila y equilibrada. Experimente con distintos tonos y utilice los arriates y las macetas para dar más profundidad y dimensión al jardín.
Fucsia fantasía El fucsia es un color llamativo que enseguida atrae las miradas. Combine bulbos como los de fresias, dalias o gladiolos de color fucsia con plantas de hoja perenne para crear un alegre contraste. El fucsia aporta un toque tropical al jardín.
Naranja ardiente El naranja es sinónimo de energía y calor. Los bulbos como los de Canna o de lirios de color naranja ofrecen todo un espectáculo en el jardín. Este color ardiente queda bien en un arriate expuesto al sol y, además, ¡atrae a las mariposas!
Amarillo radiante El amarillo es un color verdaderamente veraniego que irradia alegría y optimismo. Los bulbos de verano, como los lirios de día (Hemerocallis), las dalias amarillas y las anémonas amarillo brillante, son opciones perfectas.
Morado intenso El morado es un color elegante y misterioso. Con bulbos como los de esplendor púrpura (Liatris) y Agapanthus, añadirá un ambiente majestuoso al jardín. El púrpura contrasta a la perfección con los colores claros y crea un aspecto sofisticado.
Blanco luminoso Si quiere que su jardín transmita frescor y serenidad, elija flores blancas. Los gladiolos blancos o la leche de pájaro (Ornithogalum) aportan calma y equilibrio al jardín. El blanco refleja muy bien la luz, sobre todo al atardecer, y contrasta a la perfección con las flores de colores vivos.
Rojo robusto El rojo simboliza la pasión y la fuerza. Para que su jardín rebose energía, le recomendamos usar bulbos de flores rojas, como las dalias de tonos rojos vivos y los gladiolos. Estas flores provocan una intensa explosión de color, sobre todo si se combinan con naranja o amarillo.
Azul cielo Las flores azules transmiten tranquilidad. Por ejemplo, las anémonas o los lirios africanos (Agapanthus). Proporcionan un telón de fondo fresco y relajante para tonos más cálidos y son perfectos para crear rincones apacibles en el jardín.
Rosa romántico El rosa es el color del romanticismo y la sensibilidad. Con dalias, anémonas o gladiolos de color rosa pálido, creará un ambiente romántico en el jardín. El rosa combina bien con el blanco y el morado y, juntos, transmiten armonía.
Violeta sorprendente El violeta es un color que enseguida llama la atención en el jardín y es un poco más sutil que los tonos intensos. Utilice gladiolos, iris o dalias de color violeta para crear un efecto dramático. El violeta queda muy bonito combinado con amarillo o blanco, en una paleta de colores equilibrada.
Coral esplendoroso El coral es un color único y alegre, perfecto para un jardín de verano. Los bulbos como las begonias, los gladiolos o los lirios de color coral dan al jardín un aspecto fresco y moderno. Es un color que combina sorprendentemente bien tanto con tonos cálidos como fríos.
Plante los bulbos de verano en primavera
Los bulbos de verano se plantan en primavera para que florezcan en verano. Procure plantar los bulbos en un suelo con buen drenaje y en un lugar soleado. ¡Le sorprenderá la explosión de colores que dará vida a su jardín!