El teletrabajo ha llegado para quedarse y, con él, la necesidad de adaptar espacios en nuestro hogar. Transformar los jardines, terrazas o balcones en despachos estivales nos conecta con la naturaleza y favorece el flujo de trabajo
Incorporar especies que ayuden a reducir la temperatura del jardín, crear ambientes serenos a través de las últimas tendencias o situar plantas que potencien la sensación de bienestar son algunos de los consejos que comparte el experto en paisajismo Fernando Pozuelo sobre cómo trabajar en remoto sin salir del jardín
Habilitar en nuestro hogar una zona de despacho se ha convertido en prioridad tras la instauración del teletrabajo. De hecho, cuando hablamos de trabajo en remoto durante los meses calurosos, los jardines pueden convertirse en un oasis laboral. Muestra de ello es la tendencia que ha arraigado esta nueva forma de desarrollar las tareas laborales, denominada ‘backayard office’, que aboga por habilitar espacios para desarrollar nuestras funciones diarias en los jardines, y terrazas de los hogares.
Pero, ¿podemos ser productivos en estos espacios outdoors?
La respuesta es afirmativa. En Japón existe una filosofía llamada “ikigai”, que enfatiza la importancia de encontrar el equilibrio en diferentes aspectos de la vida. Según este concepto, en el ámbito laboral, existen diferentes leyes o normas que favorecen el flujo de trabajo y ayudan a las personas a estar en armonía en el trabajo en su día a día. Este concepto invita a rodearnos de elementos que inspiran al ser humano como especies naturales u elementos que nos transportan a algún recuerdo pasado. “La naturaleza nos aporta esa creatividad necesaria para realizar las tareas laborales, gracias a los beneficios que reciben los seres humanos al estar en contacto con ella”, comenta el experto en paisajismo Fernando Pozuelo.
Así, incorporar una pequeña oficina a un espacio natural dentro del hogar es un proyecto paisajístico con un gran valor para los trabajadores.Según Fernando Pozuelo, añadir a estas zonas especies vegetales garantiza un aumento de la sensación de confort, ya que transforma los gases nocivos del aire; se logra mejorar el rendimiento del trabajador y los beneficios que aportan las plantas en el hogar se pueden hasta percibir con los cinco sentidos. Muestra de ello son las especies como la lavanda, que libera un aroma con químicos que son benéficos para el sistema nervioso; la menta, que es una de las plantas aromáticas más conocidas, o el Hisopo, que puede aportar un gran olor a nuestro jardín.
Pero, ¿cómo podemos transformar nuestros jardines, terrazas o hasta balcones en pequeñas oficinas y trabajar este verano al aire libre?
Fernando Pozuelo comparte consejos de interiorismo combinados con su experiencia en paisajismo para acercar el teletrabajo a los espacios verdes de los hogares.
Tu jardín debe ser una prolongación del interior del hogar. Independientemente del espacio con el que se cuente -jardines, terrazas, azoteas o incluso balcones- para la transformación en una oficina, hay que optar por ambientes serenos y poco estresantes. Para ello, se deben seleccionar colores neutros, texturas claras y materiales sostenibles. Todo ello, ligado con las tendencias del momento, ayudarán a crear una prolongación del interior del hogar dentro del espacio verde.
Vegetación y luz natural como fuente de inspiración. Según el experto, las oficinas deben estar repletas de vegetación por sus beneficios en el ambiente laboral. Añadir especies a cualquier entorno siempre aporta un valor añadido, también en nuestros espacios exteriores. Algunos ejemplares óptimos para ser incorporados en una oficina natural, aprovechando el periodo de vacaciones y las altas temperaturas, pueden ser plantas tropicales de hoja grande, cactus o jardines verticales. Además, estos espacios al aire libre nos permiten realizar actividades laborales y abandonar el uso de la luz artificial tan nociva para la vista.
Aloe Vera o la Sanseviera, plantas que absorben el calor y refrescan. En algunos jardines o terrazas las estructuras como cristaleras o cerramientos permiten que estas estancias puedan llegar a utilizarse también cuando las temperaturas sean más bajas.
Sin embargo, con el calor aumentando día a día, existen métodos naturales para rebajar la temperatura de las estancias de la casa y también de los jardines. Algunas de las especies que podemos incorporar en las llamadas oficinas verdes son especies como la Palmera Areca -originaria de Madagascar, no requiere unos cuidados especies y es capaz de eliminar toxinas del ambiente, además de reducir la temperatura-; la Sanseviera -recomendada por la NASA para purificar el aire de elementos tóxicos-; el Aloe vera -capaz de limpiar el aire de nuestro hogar gracias a la alta emisión de oxígeno, lo que ayuda al descenso de la temperatura del hogar- o el Helecho de Boston -que aporta al ambiente un alto nivel de humedad, entre otros beneficios-.
Incorporación de mobiliario cómodo y adaptado. La comodidad es un requisito indispensable a la hora de hablar de mobiliario para oficina. Estas piezas deben ser resistentes al exterior, ergonómicas y estéticas. Los elementos que se incorporen para organizar esta oficina natural deben contar con una buena estructura ya que a la vez de estético y resistente deben aportar una infraestructura capaz de aportar todo lo necesario para desempeñar las tareas laborales. A diferencia del mobiliario que se suele utilizar dentro de las oficinas, en esta nueva forma de trabajo se utilizan mimbres, sisales, maderas y tejidos que evocan un cromatismo natural.
Espacios donde fluya la energía. Mantener el orden en nuestra oficina natural es crucial para el equilibrio energético, al igual que encargarnos del mantenimiento de las especies naturales que forman nuestro oasis laboral. El espacio ajardinado nos permite colocar mobiliario fuera de los estándares de la oficina, incorporando tumbonas y hamacas, evocando esa sensación vacacional creando un despliegue de las capacidades creativas.
